Diario

  Recoge Gregorio Luri, en este artículo , de La paz, de Aristófanes: Un campesino ve caer mansamente la lluvia desde su casa y siente que no hay nada mejor que este espectáculo. No puede ni podar, ni cavar la viña porque la tierra está empapada, así que llamará a sus vecinos.

  ¿ Y si confinásemos al gobierno? De hecho, creo que se ha autoconfinado : ' N o hagas nada, deja que se mueran, imprudentes como son'.

  Todo lo que este hombre  dice   tiene sentido. Un sabio. A c ompleta r con la entrevista en Babelia .

  ¿Qué harán estos manifestantes cuando el mandado Illa confine todo Madrid?, me preguntaba cuando los he visto como primera noticia en TV1. Me ha costado entender el truco para el final lo he conseguido. No habrá estado de alarma para Madrid, no habrá confinamiento como tal, sino algo parecido pero con otras palabras. Pero ese no es el truco. El truco consiste en que el gobierno impondrá las medidas generales a Madrid pero será la CAM quien las lleve a cabo. Con lo cual los actuales manifestantes seguirán manifestándose contra Ayuso y apareciendo como principal noticia en los telediarios de la 1. De ese modo, Muñoz Molina y su esposa podrán seguir componiendo artículos para EP, en los que con apariencia de neutralidad, se manifiesten agriamente contra el PP, causante con las otras derechas de la actual zozobra de España. Una de dos o el diseño es perfecto o cuentan con que los españoles no lo pillan (son tontos) o las dos cosas.

Los grititos del mandado Illa. El pobre filósofo Illa, ex alcalde de un pueblo barcelonés, y sus grititos: hay que confinar Madrid, hay que confinar Madrid. Pues hazlo, quién te lo impide, eres el único que tiene las competencias. Por qué no lo haces. Y que escuchen a los científicos dice, el que se asesoraba en un comité de expertos que nunca existió. Ayuso se lo tiene bien merecido por escoger como asesor de comunicación al memo Rodríguez, borracho documentado. En medio, entre unos irresponsables y otros impresentables, la ruina y la enfermedad, la vida y la muerte de los ciudadanos, que también se merecen lo que les pasa. ¿A quién se debe que el mandado Illa y quién le manda estén ahí?

  Esto lo hacen estando en el gobierno ; qué no harían fuera de él. Y qué habrían hecho desde marzo si la gestión de la pandemia hubiese estado en manos del PP.

  Todos estamos cerca del virus. Grados de aproximación. He salido de ruta con R. Su hijo está en cuarentena, aunque aún no sabe que le dirá el PCR que le han de hacer. Amigas suyas le acaban de decir que han dado positivo. Hemos viajado en coche durante seis horas, ida y vuelta más o menos, con mascarilla y ventanas abiertas. Ricardo sólo me lo ha dicho cuando llegábamos a destino. Crucemos los dedos.

  Está de moda la literatura del yo, autoficción la llaman algunos. A menudo toma como excusa el yo para desvelar secretos o intimidades de allegados u otras personas. Hacen negocio. ¿Es admisible escribir sin su consentimiento? En Francia, un televisivo Raphaël Enthoven ha escrito un libro : «Le temps gagné», «El tiempo ganado». Entre secretos de famosos, Carla Bruni, entre ellos, desvela cosas de su padre.

  Qué gran montañero. De mi edad, más o menos. Tiraba hacia arriba mejor que yo, puro músculo, atento a ayudar a los demás, sin necesidad de destacar, de llegar a la cumbre antes que nadie. Hice con él la semana de Pirineos del verano de 2019. Al acabar la jornada nos sentábamos en la sala del comedor del refugio de Respomuso, delante de una cerveza de litro y una bolsa de frutos secos. Era de hablar poco, si lo hacía era del pico del día siguiente, de sus dificultades, de las otras veces que lo había subido, si la conversación derivaba hacia otros asuntos callaba. Conocía los Pirineos, había ido muchas veces. De sonrisa fácil. Me dicen que hoy ha muerto. No sé de qué, no pregunto. Parece imposible. 

  En el orden de la vida hay quien posterga el interés personal por una idea en la que cree, y quiere que triunfe. De modo consciente o inconscientemente, encarrilamos la trayectoria vital hacia la consecución de un objetivo. Lo más habitual es entrelazar el interés propio con una motivación en la que incluimos el bien común. Sólo unos pocos viven al margen, o eso creo. Ganarse la vida dedicándose a la medicina o al magisterio o al periodismo, a la ingeniería o a la política nos hace felices si nos arregla la vida y nos llena de ardor moral . Hay profesiones que por su naturaleza están marcadas por la entrega al bien común, pero la mayoría no quiere verse tildado de egoísta o asocial . Lo ideal es combinar ambas cosas, medio con el que ganarse la vida y entrega al bien común, sin pensar en ello, sin hacer una profesión de fe pública de ello, sin exhibición de una moral superior. Pero ¿no  va de soi en un médico, en un profesor, en un político? ¿Qué nos resultaría intolerable en su co

  1. Como siempre es AE quien hace las preguntas tan incómodas como pertinentes que este tiempo espera que se le hagan 2. E n Tv1, imágenes de las manifas contra Ayuso en el telediario: no abren el plano para que se vea la cantidad exacta de gente que hay. Cómo puede una tele pública presentar la información de esa manera. 3. Y otra cosa, ¿por qué las manis organizadas por Vox sabemos que las organiza Vox y, en cambio, las organizadas por Podemos la tele nos dice que las convoca el pueblo espontáneo? 4. E s el cuento de la rana en la marmita a la que se le va subiendo la temperatura imperceptiblemente hasta abrasarse.

  “ Oh Dios, la Nada era para ti como una herida, y la refrescaste con el mundo”. (Rilke) En los años del último franquismo y primeros años de la Transición los que anhelábamos el cambio en España democrática leíamos Informaciones y después El País. Detestábamos los periódicos del régimen, arribas, alcázares y p ueblos (había populistas del régimen, sí; como hoy) . Hoy, dónde hay trazas de querer construir un nuevo régimen, sucede algo parecido, hay periódicos del régimen y periódicos liberales. El País de entonces es El Mundo de hoy.

  Es posible que la fijación de las malas ideas en el cerebro se deba a la torpeza de la expresión, al mal uso de las palabras, tanto en lo que oímos como en lo que decimos. Ve claro quien habla claro. Los ideólogos escriben con renglones torcidos. Qué hermosamente escribe hoy en una tribuna en EP Irene Vallej o. Va de mujeres tan deslenguadas como bien habladas, tan parlanchinas como enmudecidas.

  1. Hay preguntas tontas e incluso muy tontas esta es una de ellas ¿qué porcentaje de españoles es capaz de distinguir entre gobierno y Estado? 2. Y luego están los que quizá s í sepan distinguir entre una cosa y otra, pero han visto durante estos años el uso, el abuso y la intromisión del primero en segundo. Ya no les cabe sino resignación, es decir aceptan el sometimiento por hastío.

  Gastrotertulia en torno a Maigret. Seis tertulianos. De qué modo tan diferente leemos y entendemos lo que leemos. La disparidad es tan grande que entran ganas de dejarlo correr. Intento, por los hábitos adquiridos en mi pasada profesión, hacer entender, intentar que mis compañeros den un paso más en su comprensión. Paideia. Todo el mundo tiene malos hábitos y persevera en ellos. Ocurre con la población lectora, así que cómo va a modificar sus errores la no lectora. Toma Manuel Jabois en EP esta cita:

  Recuerdos de cuando era niño, las plazas de toro porticadas. En mi recuerdo Chinchón, Colmenar de Oreja. No tengo claro si alguna vez visité Colmenar Viejo. Pensaba que aún corrían los toros de aquella manera. Así que tras una ruta por la Pedriza nos hemos acercado a Colmenar de Oreja en busca de esos recuerdos. No existe nada que los ampare. La plaza de toros de Colmenar, donde un toro pilló a El Yiyo, es una plaza de ladrillo y hormigón, una plaza fea. En fin. Al menos, hemos quedado con Isabel y nos hemos tomado unas cervezas.

  Acabo de leer Aquí mando yo. Historia íntima de Podemos , de Luca Constantini. Se traga más que se lee. Es divertido ver en acción las pasiones de unos treintañeros, el poder, el sexo, la posibilidad de revolcar el país en su beneficio. Sin embargo, no es obra literaria (demasiados defectos de un italiano que no se ha hecho del todo con la lengua), ni sociológica (nada de contexto), apenas periodística, pero de un periodismo que se acerca a Jesus Javier, el de Telecinco. Habrá libros mejores, supongo, sobre el mayor corruptor político de lo que llevamos de democracia.

  Si todo el mundo quiere ser víctima porque ese es el modo de acceso rápido a la notoriedad y al beneficio, ¿quién nos salvará cuando sea necesario el sacrificio de algunos en favor de la comunidad? ¿dónde están hoy los héroes verdaderos, no los de pacotilla? He pensado en ello en los últimos tiempos, ante la actitud de muchos profesionales, de colectivos incluso, ante la pandemia. T ranscribo “ El sacrificio de Nicholson” que hoy publica Enric González en El País .

  1."La presión demográfica hace que los seres humanos están donde no deberían y se ven atrapados por el fuego. Los cielos rojizos de San Francisco nos hablan en futuro tal vez pero también un presente cada vez más amenazante". G. Altares. EP) 2. Vecinos. La música a toda pastilla, celestial, sinfónica, música de palomitas en casa a cualquier hora del día. 3. Melania. Viéndola al lado de su marido, rígida como una escultura egipcia, seria y silente como fata morgana, ausente, parece el preludio de una catástrofe, la peor representación de la mujer. 4. "Han destrozado mi proyecto vital", dice Rafael Correa, refugiado en Bélgica, ese país especializado en proteger a delincuentes políticos. ¿A cuántos se lo destrozó é l siendo presidente? 5. Recuerda Daniel Gascón lo que decía Hitchens, que el problema de los racistas es que no saben discriminar: todas las personas de una raza les parecen iguales. 6. Vacunas. L a narrativa se ha estructurado de tal modo que si

  Lo que nunca, nunca entenderán los populistas, porque no les interesa entender

  Sobre los modelos matemáticos. Al comienzo de la expansión del virus del VIH los modelos matemáticos indicaban que en un tiempo no muy largo una elevada proporción de la población mundial sería infectada. Se llegó a hablar del virus como exterminador de la especie humana. Los modelos no tuvieron en cuenta muchos factores como la planificación familiar, la concienciación pública y la educación y otros códigos de actuación.

  1. Ha sido aumentar el número de ministros, multiplicar los asesores, las comisiones de estudio e investigación, los observatorios, incluso hasta en un 20% los coches oficiales, para que desaparezcan de las redes sociales todas aquellas quejas y denuncias sobre tantos políticos españoles, sus sueldos y jubilaciones y todo lo demás. Por qué será. 2. Dice Matesanz, el creador de la red de transplantes, en una tribuna de EM (ayer): "El gobierno reaccionó con contundencia: se fue de vacaciones"

  Hay en el EP de hoy una tribuna graciosísima de un tal Antonio J. Rodríguez novelista que dice que la heterosexualidad es un dispositivo de control político y que la postal familiar de playa es la señal de un fracaso, el de no cumplir con las expectativas (de la disolución de la familia). Para partirse. Aunque él lo dice del todo en serio.

Corren muchos vídeos conspiranoicos. He aquí uno. Desmontémoslo. 1. Es evidente que no, que la población no estaba preparada para la pandemia. 2. Hollywood y las teles tocan todos los temas, especialmente los apocalípticos, así que ante cualquier crisis, tendrían de donde echar mano para 'probar' cualquier hipótesis 3. Que yo sepa no había ninguna revolución en marcha 4. La obediencia de la población 'va de soi', no se necesita preparación. Somos una especie colaborativa pero también rebaño 5. Los regímenes autoritarios no necesitan situaciones especiales para eliminar disidentes 6. No hemos visto nada de ese supuesto control tecnológico de la población 7. No hay control de los medios alternativos; al contrario, son los que mejor defienden el poder 8. Desgraciadamente no se han formado gobiernos tecnocráticos 9. No ha habido privatización de la sanidad, al contrario 10. No ha habido colonización de otros países ni control de sus recursos, ni de

  Dos adolescentes, sentadas frente a frente en un banco de la plaza, hablan de cibersexo. N o he puesto el oído, solo esa palabra y su distendida y despreocupada conversación. Otra adolescente habla por el móvil de niveles asociados a permisos de salida. En el uno, una hora si alguien viene a buscarte, en el d o s, moverse sin salir, en el tres, confinamiento. Sin dejar el móvil, se sienta y habla con otra chica y con el móvil . Otro de su misma primeriza edad l e s acompaña sin dar conversación.

  Otra vez en Castefa sin muchas ganas o no con las mismas con las que antes llegaba. Recuerdo cuando Nines me decía, Cómo se te alegra la cara , al llegar aquí. Ya no es lo mismo. Hay más dolor que placer.

El cartel que anuncia Patria , promoción de HBO, y el escandalito que se ha formado. Verdugos y víctimas al mismo nivel. A HBO le va bien, negocio. ¿Cuántos a día de hoy habrán comprendido que "la lucha nunca fue entre los asesinos y los torturadores sino entre los asesinos y la ley. Una ley que por supuesto condenó también a los torturadores" (AE)? ¿Cuántos? Por supuesto, no los periódicos que han sustituido la igualdad por la identidad como su principal razón de ser. Ni sus creyentes lectores.

  D e excursión por tierras valencianas con mi consuegro, un vizcaíno tasterrado a Valencia y de vuelta a un pueblo de Vizcaya. Vamos con el nieto. Me enseña lugares que yo desconocía: un poblado ibérico en Olocau, relativamente bien conservado, la cartuja de Porta Coeli y la casa que utilizaba Azaña en su último periplo republicano. El hombre pasa por una situación emocional, familiar, complicada. Me cuenta algo aunque no tenemos mucha confianza. Se ve que necesita atención y ayuda, aunque qué puedo decirle si apenas sé de su historia y de sus problemas. El día bonito y agradable, sin mucho calor.

  Ya no recordaba lo duro que es criar niños. La naturaleza te prepara para tenerlos cuando estás fuerte y puedes sobrellevar trabajo y crianza. Los abuelos solo estamos para pequeñas ayudas, no para estar todo el día con los niños pequeños, aunque cada niño es un mundo, como lo es cada abuelo.

  Nunca pensé que podría ser tan agotador cuidar nietos. Son otro mundo, difícil de manejar. Nada más alejado de mi ocupación habitual con los productos de la mente. Pura actividad sin objeto. No sé si todos los niños son iguales. No, claro, Lucía es un torbellino que no cesa.