37
Cada
día es una situación nueva, un estado que desconozco, al que tengo
que adaptarme o improvisar, un paso más en tu caída, aunque hay
días que parecen del revés, que te recuperas. Hago que te agarres a
mis brazos, te hago caminar, yo hacia atrás, abriéndote camino,
parece que vas a ir al suelo pero aguantas, distribuyó sillas por
todo el gimnasio, para que camines a poquitos. Te llevo de una a otra
silla, pasito a pasito, para prolongar en lo que puedas este proceso
imparable hacia el desandar. No respondes a mis preguntas, ni con un
sí ni con un no, quizá porque ahorras energía y emitir sonidos te
desgasta, la poca batería que te queda.
Comentarios
Publicar un comentario