165. Madre

            I


Este vacío

Ni pequeño ni grande

Este misterio de la vida

Ahora respiras ya no

Eres la madera que te contiene

El cristal que te refleja

La tela del vestido

Que se desmenuzará contigo

Inmóvil pétrea

Cera tu rostro

La barbilla y las orejas

La nariz afilada

Los párpados la frente

Hace unas horas latías

Bajo mis manos ya no


         II


Este mirar se acaba

Te veo como nunca te había visto

Veo la que fuiste por última vez

Desaparecerás bajo la tierra

Nunca te tendré delante como ahora

Tu camino y el mío se separan

Nunca más el calor de tus mejillas

En el dorso de mi mano

Ya no mis labios en tu frente

Sé que la que ahora veo

La que aparece en las fotografías

La que en mi mente trabaja el recuerdo

No es la que reía con los nietos

Como tampoco la campesina que fuiste

La que reía a sus clientas

En el supermercado

La que cuidaba de su hija

Fuiste tantas mujeres distintas

Que a quién puedo echar de menos

Cuando te eche de menos

Veré la que fuiste aquella vez

Y aquella otra distinta

Y todas juntas serás

La que en mí oye

El murmullo del sauce de Celada

La hierba agostada en Fuentes Blancas

Los surcos abiertos en la campa

De San Pedro Cardeña

La mies que se perdía en el camino

El botijo de la era

El baile en las fiestas de la Virgen

La alegría en la feria de Lerma

Ahí te he dejado al acabar el día

Donde fuiste joven 

Donde te hiciste mujer

Donde fuiste madre

Mi madre





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