356. Berlin


 De Hamburgo a Berlín hay una llanura verde y bosques extensos. En la calle no hay nadie que lleve mascarilla. En los interiores son respetuosos. Quizá sea una falsa impresión pero cada cual vive indiferente a quien camina al lado delante o detrás. Tanto Hamburgo como Berlín fueron enormes marismas. El agua inunda sus entrañas, sobre ella han fijado sus cimientos. Hamburgo tiene tantos kilómetros de canales como Amsterdam y Venecia juntas. Berlín extrae el agua que subyace con tuberías elevadas y la traslada al Elba y al Báltico. La arquitectura reciente, tecnológica, muestra un afán de transparencia, cristales, amplios espacios, grandes plazas y avenidas, tanta como el oculto empeño en no mostrar lo que es evidente.

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