I

 

Me viene la imagen de Ifigenia sacrificada por su padre Agamenón por una causa que para él era superior, que soplase el viento en las velas de su armada. Quién y cuándo sacrificó a I?


Tengo que escarbar para recordar su nombre. Sé que es la hermana de Rafa. Ahí nació mi conexión con ella.


Me la encuentro en la parte soleada de la falda del castillo. El pelo más blanco, las arrugas más pronunciadas, lo mismo que ella pensará de mí. Aunque es tal su ensimismamiento que solo verá en mí la imagen que de mí se forjó hace tiempo, cuando ella escribía poesía, una poesía con más cabezas que una hidra, difícil de desenredar. Y de desarraigar.


En algún momento dejó el grupo sin que nadie la echara de menos. Me ve paseando los perros y me dice que hace unos meses se le murió su gata tras 19 años de convivencia. Intenta hacer una frase con lo que siente o sintió cuando perdió a la gata. No le salen las palabras. Intento ayudarla. Quiere decirme que por fin podía salir de casa. Los animales nos hacen esclavos, le digo. No es eso, dice, tampoco... Pero no acaba la frase.


Cada vez que la veo me pregunta por María y, me dice, que siempre me hace la misma pregunta. Tienes su teléfono?, le pregunto. No, si le envío, pero no me responde. No te preocupes, le digo, yo también le acabo de enviar mis mejores deseos por el año nuevo y tampoco me ha respondido.


Mis conversaciones con ella no duran mucho, incluso no hablamos de frente, sino como esquinados. Las palabras no fluyen. Siento como un deber hacia ella.



Comentarios

Entradas populares de este blog

346. Experiencia y categorizaciones

149. EL filo de Wenlock (Cara B)

138. Cara B - Pozos profundos